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El regreso mediático de
​un agresor sexual

Con mucha extrañeza me enteré de que recientemente, el ministerio público dejó en libertad al Gordo Max, a quien hace un año se le acusó de pagar por tener sexo con menores de edad, un delito tipificado como pedofilia.
 
Ojo, este señor nunca fue encontrado inocente de los cargos que le imputaban, fue sobreseído porque la fiscalía que no fue capaz de plantear un buen caso; en el que hay una víctima desaparecida y que nadie sabe de ella, seguramente está muerta, como tantos desaparecidos en este país, que no son figuras públicas como este personaje gordito de los medios de comunicación.
 
Todos sabemos que el sistema judicial de nuestro país es corrupto, especialmente cuando hay dinero de por medio o un personaje público involucrado en un delito grave. Recordemos que junto a Max González también fueron arrestados otros tres hombres, entre ellos uno de apellido Regalado, un apellido muy conocido 
​en el país, porque es uno de los grandes financistas del partido Alianza Republicana Nacionalista(ARENA).

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Pero el hecho de que Max González regrese a la radioemisora VOX-FM donde trabajaba, recién saliendo de la prisión, es una clara afrenta para nuestra sociedad. Los medios y el sistema judicial están dejando claro, que ellos pueden hacer lo que les de la gana; cualquiera puede cometer un delito, ejercer violencia y no pasa nada, un mensaje muy malo para una democracia en formación como la nuestra.
 
La justicia no fue capaz de darle importancia al testimonio de una menor de edad que fue prostituida desde los 13 años, que fue infectada de Papiloma Humano y que tuvo hijos que no supo a ciencia cierta quién fue el padre, de cualquiera de los 30 hombres que atendía a diario. Lo que importa es que estos pobres hombres que no fueron vencidos en juicio sigan con sus vidas. ¡Qué asco de sistema judicial!
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Lo mas triste es que esta radiodifusora, no solo ha vuelto a emplear a un predador sexual que no ocultaba sus gustos previo a su captura, sino que anuncia con bombo y platillo su regreso a los micrófonos para que se incremente su audiencia. Pero lo mas deprimente, es que un periódico de circulación nacional le haga un reportaje del regreso triunfal a los medios, después de haber atravesado una prueba de dios.
 
¡Y después nos molestamos tanto cuando Donald Trump nos dice que somos un país de m…!
             
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